Pese a ser una Comunidad con una sola provincia y un territorio reducido, la riqueza y diversidad de los paisajes asturianos hacen que sean miles de personas las que se acercan cada año a descubrirlos. Y es que en tan pocos kilómetros cuadrados, Asturias ofrece preciosas playas, ríos en los que vivir todo tipo de aventuras, montes impresionantes, lagos y, por supuesto, pueblos y ciudades con una gran riqueza cultural, edificios históricos y, en definitiva, una oferta variada que cubre cualquier requisito. Además, la maravillosa gastronomía de la zona hace que todavía sea más agradable descubrir sus rincones.

Asturias ofrece diferentes formas de alojamiento para sus turistas. Cuenta con una gran cantidad de hoteles de diferentes categorías, pero también albergues o casas rurales. Pero una de las mejores maneras de recorrer esta tierra es con una caravana. Recurrir al alquiler caravanas provincia de asturias permite el máximo de libertad, ya que se puede ir a donde se desee de una manera muy económica y sin depender de que haya o no habitaciones disponibles.

Además, la caravana permite poder parar a comer donde apetezca, comprando comida en supermercados para, por ejemplo, ahorrar en desayunos y meriendas y poder disfrutar de comidas o de cenas en los locales de hostelería de la zona, pudiendo saborear platos típicos de la cocina asturiana o darse caprichos. Perfecto también si se viaja con niños, ya que comer con ellos como en casa es mucho más fácil y se sentirán más cómodos.

Las caravanas están provistas de prácticamente todas las comodidades de un hogar, adaptadas al espacio. Un espacio para comer, para jugar a juegos de mesa o sentarse a ver un poco la televisión y que por la noche se transforma de cama; una ducha y un WC para asearse y estar siempre impecables y hasta una pequeña cocina para preparar todo tipo de platos. Se puede pernoctar en un camping o en parkings adaptados para caravanas que hay en diferentes puntos de Asturias.

Al disfrutar de una caravana en alquiler, se podrá vivir la experiencia sin tener que pensar en dónde se va a guardar la caravana cuando no se use ni preocuparse por seguros y mantenimientos. Se paga solo por el tiempo que se use, se disfruta y, si más adelante se desea, se puede valorar una compra. Pero la mayoría de las familias disfrutan con el alquiler de la caravana porque comporta menos responsabilidad para ellos.