Ser cívico es algo completamente esencial, y cuando estoy en casa me doy cuenta de que los vecinos que tengo alrededor no es que lo sean, sobre todo los fines de semana que es cuando la gente suele pasar más tiempo en sus casas. En el piso contiguo al mío viven unas personas de ghana que se pasan el fin de semana entero dando voces y me molestan bastante, ya que cuando quieres dormir una siesta después de comer es imposible a causa de los berridos que profieren.
Yo me considero bastante considerado y cívico, sobre todo cuando sé que los vecinos puede que estén durmiendo. Hasta llegué a poner unos estores opacos en la salita en la que tengo la televisión para no molestar por las noches en el patio interior, ya que si tengo la luz encendida de noche el patio interior se queda muy iluminado y eso me molesta y aparte no quiero que ningún vecino me llame la atención. Estos estores opacos que coloqué en las ventanas los aproveché de la basura. Un día iba por la calle y cuando iba a llegar a mi casa encontré dos estores opacos apoyados en un contenedor y me parecieron que estaban bastante nuevos por lo que decidí cogerlos. No me fue difícil poder adaptarlos a lo que yo necesitaba para colocar en las ventanas del patio interior. Desde que los coloqué he notado que el patio interior por la noche está como debería estar, que es oscuro para no molestar.
Cuando era joven y vivía en la casa de mi madre me acostumbré a jugar a un juego para no hacer ruido por el pasillo de casa de mi madre que era de madera y crujía mucho. Aprendí a caminar por él haciendo el mínimo de ruido y ese juego se convirtió en una obsesión. Lo que me ha venido muy bien para ser sigiloso y no molestar a los que están a mi alrededor. Ojalá hubiese más gente que se molestase en no hacer ruido porque sí en sus casas, que es algo que no suele pasar. La gente cree que en sus casas pueden hacer todo el ruido que quieren y eso no puede ser así.