La teletienda tiene un sistema de ventas muy interesante y que realmente es más que efectivo. Consiste en anunciar sus productos de manera constante y muy repetitiva mediante publirreportajes que incluso pueden parecer cómicos de tan absurdos que son, pero que enganchan al telespectador de una manera curiosa. No importa cuántas veces se haya visto el anuncio, la gente vuelve a verlos y casi se los sabe de memoria a pesar de ser largos.
Evidentemente, no todo el mundo ve la teletienda ya que suele ser a horas intempestivas, pero como sus anuncios tienen ese lado cómico acaban saliendo en zappings o incluso la gente los repite. El resultado es que todo el mundo conoce estos productos tv incluso sin ver el programa en el que aparecen.
Por eso, es lógico que busquen comprarlos en una tienda normal, ya sea física u online. Y ahora es posible hacerlo. En muchas tiendas hay un apartado para productos anunciados en televisión en el que se incluyen muchos de los artículos más famosos de la teletienda, tanto clásicos de siempre como novedades que están saliendo.
Son, en general, artículos curiosos, que despiertan las ganas de comprar del consumidor porque tienen apariencia novedosa y útil aunque no siempre sean ni tan novedosos ni tan útiles. De hecho, hay ciertos aparatos que cada cierto tiempo vuelven a aparecer ligeramente cambiados y modernizados, pero con el mismo espíritu. Un buen ejemplo son los aparatos para hacer gimnasia, que aunque puedan sufrir modificaciones, siguen siendo básicamente los mismos desde hace años.
La utilidad de los productos de la teletienda no siempre es cuestionable. Las almohadas cervicales, por ejemplo, se popularizaron por este método y no hay duda alguna de su gran eficacia. Para muchos, ha sido todo un cambio a la hora de dormir. Y lo mismo sucede con otros superventas como las sartenes antiadherentes con las que las cuales mucha gente está encantada, siempre que las usen correctamente.
El problema es que para muchos, teletienda es sinónimo de mala calidad, algo que no es cierto. En este espacio se venden todo tipo de cosas y siempre las hay mejores y peores pero, en cualquier caso, no se puede negar que son curiosas y llamativas, lo que empuja a que muchas veces se compren solo por ver qué es lo que ofrecen realmente y poder ver como funcionan.