DE CAMPAMENTO

Me pregunto si todavía existirán los campamentos de verano a los que íbamos cuando éramos chavales, supongo que sí pero como no tengo niños de esa edades en mi entorno tampoco es que esté muy enterado de esas cosas, supongo que en los campamentos de hoy en día los monitores estarán todo el día gritando a los chavales para que dejen tranquilos sus teléfonos móviles para que les hagan un poco de caso a ellos, los chavales de hoy en día no saben disfrutar de la naturaleza por sí mismos, hay casi que obligarlos, pero eso tampoco es del todo suya, ya que nosotros no crecimos con las mismas comodidades que ellos ni con sus entretenimientos, a nosotros se nos entretenía con casi cualquier cosa con la que se pudiese jugar y a los chavales de hoy casi solo les gustan los videojuegos y la televisión y de ahí no los quitas, pero a fuerza de empujarles empiezan a disfrutar de la naturaleza como hacíamos nosotros y de las actividades que hacíamos de un lado para otro durante todo el día.

 

Por ejemplo ¿a quien no le enseñaron a disparar con un tirachinas hecho con un palo en forma de i griega y una goma elastica? personalmente era de las cosas que más me gustaban en esos campamentos a parte de cuando nos llevaban a los ríos que había en las cercanías. En los campamentos a los que fui yo no dormíamos en tiendas de campaña, pero había en la época muchos en que sí se dormía, y esa para muchos niños era su primera experiencia en una tienda de campaña y a casi todos era lo que más les gustaba aunque hiciese un poco de frío a veces.

 

Estos campamentos además de servir para que los chavales se relacionen con otros chavales de su edad, sirven también para que los padres se puedan despreocupar de sus hijos durante un mes en las vacaciones de verano, cosa que muchos seguro que agradecen una barbaridad, pero cuando se termina el campamento de verano no les queda otra que volver a la rutina diaria.