UNAS MUDANZAS COMPLICADAS

Ya me he cansado de ver la ventana de mi habitación desnuda y para dejar de verla así me he comprado unos estores paqueto para que alegren mi habitación un poco que tiene las paredes demasiado blancas. He de buscar algo para decorar las paredes pero todavía no sé qué es lo que voy a poner, tengo algunos pósters que tenía colgados antiguamente, solo que alguno de ellos puede ser un poco ofensivo si alguien que no me conoce entra en la habitación, cosa que personalmente me importa poco pero mejor intentar llevarse bien con todo el mundo y no crear conflictos. 

Por lo menos he podido mantenerme en la misma habitación durante unos cuantos años ya que desde antes de que comenzase la pandemia me he visto obligado a cambiar de habitación unas cuantas veces por culpa de unas obras que estaban haciendo en el edificio colindante con el mío y que duraron unos cuantos años, desde que empezaron esas obras me tuve que cambiar de habitación en tres ocasiones diferentes y he decidido que ya no me voy a volver a mover más, aunque me gustaba más vivir en el lado de la casa en donde estaba más cerca del baño y de la cocina. Hoy en día tengo que recorrer el pasillo de mi casa entero cada vez que quiero ir al baño o a la cocina a coger algo de comer, y el pasillo de mi casa es bastante grande por lo que a lo largo del día tengo que caminar bastante, algo que no me viene demasiado mal porque me hace falta bajar un poco de peso. El confinamiento influyó muy mal en mi físico y engordé bastantes kilos porque comía pero apenas me movía para poder quemar todo lo que me comía. Durante la última mudanza de habitación se me ocurrió poner la bicicleta estática en la habitación, ya que me sobraba espacio y me ayudó un poco a bajar de peso, pero hay que tener bastante fuerza de voluntad para ponerse a pedalear en casa porque estás rodeado de distracciones.

La casa de mi hijo 

Hay muchos tópicos asociados a las madres, pero algunos, para qué nos vamos a engañar, son ciertos. Cuando llegamos a la casa de nuestro hijo recién independizado vemos problemas por todas partes y nos gustaría sacar la escoba sin ni siquiera habernos quitado los zapatos. Pero hay que ser paciente y no ser totalmente sincera, que el pobre está adaptándose a su nueva vida como puede. Pero, poco a poco, y siempre que él esté de acuerdo, se pueden ir arreglando cositas…

Lo de la limpieza lo doy por perdido. Está claro que no tiene pensado, a corto plazo, dejar la casa como debe estar, pero sí que me ha permitido que haga algunos cambios para que se sienta más cómodo. Para empezar, no tiene cortinas. Cuando entré por primera vez le dije: “bueno, aquí y aquí pondrás cortinas o tal vez algún estor…”. Y él respondió: “¡Ah!, pues no lo había pensado”. Pues tendré entonces que pensarlo por él.

Me ha dado carta blanca con este tema así que he pensado en unas cortinas noche y dia para el salón. Como no se aclara muy bien cómo las quiere y está claro que podría vivir sin cortinas unos meses mes, las cortinas noche y día me parecen una buena solución en su caso por lo que permite graduar la entrada de luz a su gusto dependiendo de la hora del día. Yo misma las tengo en el salón de la casa de la playa y siempre me ha parecido una opción divina, sobre todo en lugares en los que hay una importante entrada de luz.

Para su habitación, no tengo dudas de que hay que colocar un estor. Es una habitación que está muy cerca del edificio de enfrente y se ve todo con la persiana para arriba. Mi hijo no está muy preocupado de momento, pero quizás cuando se empieza a sentir observado la cosa cambie. Creo que un estor tradicional vendría bien en esta zona. Por lo demás, al margen de las cortinas noche y día y el estor creo que en la cocina vendrían bien unas cortinas tradicionales estampadas: a él siempre le gustaron las que tenemos en nuestra cocina, así que no notará la diferencia.

Decora la habitación de tu bebé antes de conocer su sexo

Ya no está vigente eso de decorar la habitación de los niños de azul y la de las niñas de rosa. Un bebé no tiene condicionantes de género y por eso, decorar su habitación no tiene por qué ser un problema independientemente de que no se conozca su sexo. Hay muchas alternativas a estos colores que harán que la habitación de tu bebé sea la más acogedora y bonita independientemente de que no sepas, o no quieras saber de antemano, si va a ser un niño o una niña.

El primer paso para decorar la habitación de un bebé es pintar las paredes. Está demostrado que los colores intensos que tanto parecen gustar a muchos padres no son los más indicados ya que los bebés agradecen los tonos pastel más suaves que les hacen sentir relajados y a gusto. Un amarillo pastel o un suave lila pueden ser muy adecuados para una habitación en la que durante meses, lo que más se va a hacer será dormir.

El segundo paso para decorar es Comprar Estores para bebes a medida. Escoge un estor en un tono suave pero con dibujos infantiles bonitos, como osos, payasos o personajes fantásticos como unicornios. Una vez que hayas escogido el estor y sus protagonistas, estos pueden convertirse también en tema para la decoración de la pared, comprando un vinilo de gran tamaño para colocar al lado de la cuna con el mismo motivo.

Una cuna en tonos de madera natural, mejor claros, es ideal para este ambiente tan relajante y agradable que estamos buscando. Las cunas que se convierten en cama son una estupenda alternativa, sobre todo las que son muy bajas, a ras de suelo, porque resultarán más seguras para la transición aunque sean algo más incómodas para los papás.

Puedes comprar una estantería a juego para colocar algunos muñecos y parte de la ropita del bebé. También puedes añadir, siempre en el mismo tono de madera, una cómoda con cambiador o bañera en su parte superior y un armario que sea lo suficientemente grande para que el bebé pueda aprovecharlo durante muchos años.

Por último, escoge una bonita lámpara y una alfombra sin pelo fácil de limpiar sobre la que el niño pueda aprender a gatear en pocos meses. No recargues la habitación con juguetes, peluches o fotos porque una vez que el bebé llegue a la familia va a tener muchos regalos de ese tipo que querrás lucir, por lo que es mejor dejar espacio.

Nuevos y nuevos vecinos 

Hemos tenido tres familias distintas de vecinos en seis meses. Los dueños del piso, que se fueron a una urbanización que estaban construyendo al lado, bastante mejor que la nuestra. Luego, llegó otra familia, amiga de los dueños que solo estuvieron en esa casa cuatro meses. Un verdadero misterio, porque hasta pusieron su nombre en el buzón, ¿solo para cuatro meses? 

Y un buen día esta familia se fue y llegó otra, ¡qué también es amiga de los dueños! Y, además, amigos de otros de los vecinos de la misma planta, de forma que están todo el día entrando y saliendo de las puertas. Tal vez incluso tiren el tabique para que las dos familias vivan juntas. 

Pero, lo que nos preguntamos es, ¿por qué en esta urbanización y las de los alrededores son todos tan colegas? ¿Será como lo de la Semilla del Diablo, una especie de secta satánica que está esperando al advenimiento del Anticristo? Bueno, nuestro hijo ya ha nacido y no tiene pinta de líder de las hordas infernales, así que por ahí estamos tranquilos. 

Por lo demás, los nuevos vecinos son súper apañados. Los hemos visto en la Tienda de cortinas a medida del barrio haciendo una macro compra. Nosotros estábamos echando un ojo porque estábamos pensando en comprar cortinas para el salón. Desde que llegamos aquí no hemos puesto cortinas en el salón. Pero con la llegada de los nuevos vecinos que están siempre echando un ojo por aquí y por allá, se nos ocurrió que tal vez había llegado el momento de tener algo de intimidad. Pero como quiera que ellos ya se adelantaron y van a tener sus propias cortinas, lo hemos dejado en stand by.

Y es que cuando entran unos nuevos vecinos en una casa siempre hay un poco de ‘movida’. En este caso trajeron cientos de cajas que fueron apilando en el pasillo. Lo normal en estos casos. Además no pararon de llegar operarios, como los de la Tienda de cortinas a medida a instalar las cortinas. Un no parar. A ver si ahora que empieza el cole, todos nos vamos relajando un poco y podemos seguir con nuestras vidas sin tanto ruido.

VENTAJAS DE MÁS ESPACIO

Para completar mi nueva habitación es necesario que consiga un estor screen enrollable y ya no me tendré que preocupar más de la decoración. El problema que tengo es que la habitación en la que vivo ahora es bastante más grande por lo que hay eco cuando toso o me río alto. Con el estor screen enrollable soluciono ese problema ya que la ventana está justo en frente al cabecero de mi cama. El resto ya está todo listo, he conseguido una nueva alfombra para colocar en la zona que ahora está destinada para la zona de hacer deporte. Lo único que me falta es recopilar mi ropa que está desperdigada por las habitaciones en las que he vivido durante estos años y guardarla en el armario, que he estado reparando, de mi habitación.

Lo que me estaba molestando de mi nueva habitación es que el suelo cruje en casi todos lados, pero a fuerza de probar ya he conseguido descubrir dónde pisar para no hacer ruidos por la noche, porque no me gusta molestar a los vecinos con ruidos molestos. Pero por contra en la habitación nueva me ahorro los ruidos que estaba sufriendo en mi antigua habitación por culpa de una de mis tías que se hizo un comedor encima de mi habitación.

 El tener sitio para hacer ejercicio en mi nueva habitación es muy positivo porque desde que comenzó todo este tema del coronavirus no es que haya hecho demasiado ejercicio y he engordado bastante y no me viene nada mal bajar un poco de peso. Y cuando hablo de un poco de peso es bastante peso, ya que mi barriga ha crecido bastante desde que comenzó el confinamiento. He de hacerme una tabla de ejercicios para poder hacer todos los días y que me obliguen a sudar, que es lo que de verdad necesito. Porque por ahora no tengo ninguna clase de intención de ir a ningún gimnasio, ni de hacer deporte con otra gente. Pero en cuanto haya una vacuna estoy deseando poder volver a la piscina que es algo que sí que echo de menos.

Cambios en el despacho 

Tal vez no sea el momento más adecuado porque creo que me quedan pocos meses en esta casa, pero he decidido hacer unos cambios en mi despacho que está un poco soso. Esta casa tiene dos habitaciones: una de ellas la utilizo como dormitorio y la otra como despacho. Parece un derroche en los tiempos que corren en los que el metro cuadrado está por las nubes, pero solo se vive una vez.

Además, yo sé lo que es trabajar durante años en la mesa del comedor. Efectivamente, mi despacho estuvo situado durante mucho tiempo en cualquier sitio que entrase un portátil, que suena muy moderno eso de trabajar en cualquier parte, pero no es práctico ni rentable, sobre todo si estás trabajando de verdad, no haciendo que trabajas en el Macbook mientras sorbes sonoramente un café en un Starbucks. 

Yo, cuando trabajo, trabajo. Y si quiero tomarme un café entonces no es trabajo. Por eso necesito un despacho con buena iluminación, con un mínimo espacio y sin gente alrededor hablando de cosas modernas. Actualmente, tengo un espacio así pero quiero hacer unos cambios, instalando cortina veneciana en la ventana, quitando algún pesado armario que no pinta mucho en ese lugar y con una nueva mesa de trabajo.

Digo que no sé si es el mejor momento porque en unos meses la arrendadora me va a atracar con una subida de precio para adaptar el precio al “mercado”. Y ya la conozco así que es más que probable que tenga que poner pies en polvorosa y buscar otra casa un poco menos adaptada a los precios del mercado…

Pero mientras tanto no quiero quedarme con los brazos cruzados porque este despacho necesita aire nuevo. La cortina veneciana es algo que tenía muchas ganas porque las he visto en otras casas y me parece muy relajante para ese espacio: poder graduar la luz según el momento del día o mi estado mental… Y necesito una nueva mesa de trabajo un poco más amplia porque cada vez tengo más aparatos en el despacho y ya no sé dónde colocarlos.

TIENE QUE HABER MÁS CIVISMO

Ser cívico es algo completamente esencial, y cuando estoy en casa me doy cuenta de que los vecinos que tengo alrededor no es que lo sean, sobre todo los fines de semana que es cuando la gente suele pasar más tiempo en sus casas. En el piso contiguo al mío viven unas personas de ghana que se pasan el fin de semana entero dando voces y me molestan bastante, ya que cuando quieres dormir una siesta después de comer es imposible a causa de los berridos que profieren.

 

Yo me considero bastante considerado y cívico, sobre todo cuando sé que los vecinos puede que estén durmiendo. Hasta llegué a poner unos estores opacos en la salita en la que tengo la televisión para no molestar por las noches en el patio interior, ya que si tengo la luz encendida de noche el patio interior se queda muy iluminado y eso me molesta y aparte no quiero que ningún vecino me llame la atención. Estos estores opacos que coloqué en las ventanas los aproveché de la basura. Un día iba por la calle y cuando iba a llegar a mi casa encontré dos estores opacos apoyados en un contenedor y me parecieron que estaban bastante nuevos por lo que decidí cogerlos. No me fue difícil poder adaptarlos a lo que yo necesitaba para colocar en las ventanas del patio interior. Desde que los coloqué he notado que el patio interior por la noche está como debería estar, que es oscuro para no molestar.

 

Cuando era joven y vivía en la casa de mi madre me acostumbré a jugar a un juego para no hacer ruido por el pasillo de casa de mi madre que era de madera y crujía mucho. Aprendí a caminar por él haciendo el mínimo de ruido y ese juego se convirtió en una obsesión. Lo que me ha venido muy bien para ser sigiloso y no molestar a los que están a mi alrededor. Ojalá hubiese más gente que se molestase en no hacer ruido porque sí en sus casas, que es algo que no suele pasar. La gente cree que en sus casas pueden hacer todo el ruido que quieren y eso no puede ser así.

Los tres textiles que cambiarán tu dormitorio

¿Quieres cambiar la imagen de tu dormitorio? Puedes hacerlo rápidamente con tan solo realizar tres cambios en los textiles que te van a salir muy económicos y que le darán un aire nuevo a tu habitación sin tener que cambiar muebles ni pintar.

1) Cambia tus cortinas por unos estores. Si quieres cambiar la imagen de tu dormitorio ponte a la tarea para buscar estores. En una tienda de venta estores online podrás encontrar una gran variedad de modelos y ver cuál puede combinar mejor con los colores de tu habitación, especialmente los de las paredes y los de la ropa de cama.

Escoge el estilo de estor que más te guste, tienes muchas variedades para elegir. Los enrollables son los más cómodos y los paquetto los más atractivos y bonitos. Pero también puedes elegir modelos como los estores venecianos de tela, muy originales y poco vistos. En cuanto a colores y estampados, lo más seguro es apostar por las tonalidades lisas, mucho más fáciles de combinar si eres de esas personas a las que les gusta variar de colchas.

2) Compra una colcha bouti. Las colchas bouti están de moda. Nos referimos a esas colchas ligeramente guateadas, con cuerpo y que visten muy bien la cama. Permiten hacer la cama al estilo tradicional, al contrario que las fundas nórdicas, por lo que gustan mucho a las personas que quieren una habitación clásica. Las hay con todo tipo de estampados y acorde con todas las tendencias actuales.

Puedes encontrar colchas bouti en blanco total para los ambientes más minimalistas o con estampados suave de flores para las habitaciones más románticas y femeninas. Los tonos metalizados son muy actuales y quedan bien en las habitaciones más elegantes. Incluso se pueden encontrar muchas colchas bouti con estampados desenfadados y muy juveniles o con motivos infantiles para las habitaciones de los niños.

3) Juega con los colores de los cojines. Por último, también puedes jugar con las fundas de cojines de diferentes colores. Si las escoges en tono liso es mucho más fácil combinarlos entre sí y conseguir el look exacto que quieres para tu habitación.

Muchas personas optan por utilizar dos cojines a juego con la colcha, que suelen ser los que vienen acompañándola, y completan el juego con cojines lisos a juego con el tono de fondo de la colcha o del principal del estampado.

Sentirse a gusto en el dentista

Supongo que a nadie le gusta ir al dentista pero es una de esas cosas que hay que hacer, una vez al año como mínimo ¿no? El caso es que yo he ido a cuatro dentistas en el último año y pico: cuatro diferentes. ¿Y por qué tantos? Porque no encontraba uno que me convenciera. Soy muy aprensivo y lo de que alguien me hurgue en la boca no lo llevo nada bien.

Me ha pasado de todo en un dentista: desde aquella que me dice a la hora de terminar que se le olvidó ponerme anestesia, hasta el que se pone a hablar por teléfono en mitad de una intervención. No sé si he tenido mala suerte (supongo que sí) pero les he cogido un poco de manía: razones no me faltan.

Si es que hasta las salas de espera me ponen de los nervios: siempre tan angostas y poco amables. Por eso cuando entré en aquel dentista nuevo en el barrio, algo cambió con tan solo cruzar la puerta. En vez de tener una decoración anodina típica de salas de espera, tenía su propia personalidad: con paneles japoneses y muchos detalles que hacen referencia a la cultura oriental. Cuando te sientas a esperar allí no tienen la sensación de estar en un dentista y eso ya es de valorar.

Pero lo importante, claro está, es el tratamiento: y todo el personal liderado por la odontóloga es muy amable, sin ser excesivamente serviciales: el punto justo para tratar a un cliente en una situación de este tipo. Yo llevaba tiempo con un problema en una muela que no acaba de solucionar y me propusieron un plan de actuación que finalmente fue el indicado.

Cuando cogí un poco de confianza con la dentista le pregunté por la originalidad de la decoración del local, con sus paneles japoneses y todo el aspecto oriental: me dijo que, en realidad, nunca había estado en Japón, pero que un amigo suyo se lo había recomendado para dar un toque distintivo al espacio. Sentí un poco de decepción al principio, pero qué importa: la cuestión es que he encontrado a mi dentista… por fin.

ADELANTARSE A LA NAVIDAD

Ya está llegando la navidad, apenas faltan un par de meses, y este año me gustaría adelantar la compra de los regalos de navidad para no tener que andar con prisas de última hora y largas colas de espera en las cajas registradoras. El mayor inconveniente es que todavía no sé qué comprarle a nadie. Solamente sé de uno, y eso es porque me lo han pedido expresamente, se trata de un estor enrollable que necesita uno de mis amigos para su nuevo piso.

Ahora tengo que estrujarme el seso para saber lo que le puede gustar a cada uno tanto mis amigos más directos como mis familiares.

No mucha gente compra los regalos antes de tiempo, me parece que es un poco arriesgado pero al mismo tiempo es muy inteligente. Es arriesgado porque lo que compres para cada uno en un momento del año puede que no sea lo que quiera en navidad, a lo mejor le habían echado un ojo a cualquier otra cosa. Pero al mismo tiempo puede ser muy inteligente porque te quita todo el estrés que tiene comprar los regalos en navidad, cuando el resto de la gente esté comprando sus regalos yo podré estar completamente relajado tirado en el sofá con la tranquilidad de haber comprado todos los regalos con tiempo suficiente.

 

Voy a tener que entrar en algunas páginas de internet donde me puedan dar ideas sobre lo que le voy a comprar a cada uno, espero que no me lleve demasiado tiempo. Porque tampoco quiero que la compra de regalos anticipada se eternice más de la cuenta, más que nada porque lo hago para ganar tiempo yo y no para que me lleve más tiempo tener que comprarlos. Ojalá cada uno me expresase de forma directa lo que quieren o lo que necesitan para que de ese modo me resultase mucho más sencillo saber qué comprar. Pero por desgracia a casi nadie se le ocurre nada que pueda querer antes de que llegue la navidad, y no queda otra opción que tener que pensar en lo que a cada uno le pudiese gustar.